La Paz - 24 de Febrero de 2015| Unidad de Comunicación
Una de las estrategias que persigue el Ministerio de Salud para prevenir Enfermedades Crónicas no Transmisibles principalmente la hipertensión arterial y la diabetes es la que tiene que ver con los buenos hábitos alimenticios en la población, entre los que se encuentra la "comida consciente" como una alternativa para mejorar la salud y el medio ambiente.
La Casa de los Ninguno, proyecto medio ambiental, ubicado en la zona de Sopocachi de la ciudad de La Paz responde a esta nueva alternativa de alimentación. Según la licenciada en psicología y actual Coordinadora del Programa Integral de Comida Consciente, Angela Guerra, el proyecto fomenta el consumo responsable y mejores hábitos en cuanto a la alimentación de las personas, "debe ser bueno para la salud y para el medio ambiente, no sólo nos fijamos en criterios nutricionales, sino que también los productos, en su elaboración, deben tener un bajo impacto ambiental, resistencia a los transgénicos, deben ser orgánicos, locales, sin químicos ni elementos artificiales", dijo.
"La idea es cambiar los hábitos alimenticios por una alimentación más sana. Experimentarlo, aunque sólo sea un día a la semana, genera impacto tanto en la salud como en el medio ambiente, uno de los criterios porque no consumimos carne, por ejemplo, se debe a que la producción ganadera es una de las fuentes más grandes de contaminación y contribución al cambio climático. Por tanto, no comer carne, aunque sea un solo día, causa un gran impacto en el efecto invernadero", agrega la psicóloga Ángela Guerra.
En este sentido, la casa de los ninguno reúne a más de 60 comensales para experimentar de este momento propicio para la salud ofreciendo
un almuerzo balanceado, consensuado y preparado en equipo, los días jueves.
Para Guerra, un almuerzo balanceado consiste en dividir el plato en tres partes: la mitad debe ser ensalada de verduras o frutas frescas y crudas en lo posible, la cuarta parte con carbohidratos o fibra y la otra cuarta parte con proteína. "Por ejemplo el jueves pasado tuvimos un chili vegetariano, una ensalada mixta de verduras con rabanitos, tomates, lechugas y habas; el carbohidrato fue un plátano hervido y finalmente la proteína constituida por el chili vegetariano con frijoles, arvejas, etc.", precisó. "Lo importante es llevar estos hábitos a la casa, para la alimentación de nuestras familias, recuperar las buenas prácticas". El proyecto de comida consciente se replicó en la ciudad de Cochabamba, se pretende llevar a Sucre y ya se tiene la experiencia en la ciudad de El Alto.
