Sucre, 14 de noviembre de 2024 (UC/MSyD).- En el Día Mundial de la Diabetes, el Ministerio de Salud y Deportes recuerda a la población que adoptar estilos de vida saludables y realizarse un diagnóstico oportuno puede ayudar a prevenir complicaciones severas de esta enfermedad, como ceguera, amputaciones, insuficiencia renal y problemas cardiovasculares, que afectan a miles de personas en el país.
Según datos del Programa Nacional de Enfermedades No Transmisibles, en 2023 se registraron 8.857 casos de diabetes tipo II por cada 100.000 habitantes, lo que significa que aproximadamente ocho de cada 100 personas en Bolivia viven con esta enfermedad crónica y silenciosa.
“Nuestro mensaje es claro: la prevención es nuestra mejor defensa contra la diabetes. Las decisiones que tomamos diariamente pueden marcar una gran diferencia en nuestra vida y en nuestra salud futura. Les invito a participar activamente en esta feria, a aprovechar los servicios que ofrecemos y a compartir lo aprendido con sus familias y amigos”, manifestó el Coordinador Departamental del Programa de Telesalud Chuquisaca, Dr. Junior Girón Orosco, en la inauguración de la Feria de Salud en el Parque Bolívar de la ciudad de Sucre.
En la Feria de Salud se ofrecieron servicios de evaluación del riesgo cardiovascular, pruebas de glucemia, toma de presión arterial, evaluación nutricional, atención en salud bucal y realización de electrocardiogramas, además de la participación de la medicina tradicional, que enriquece y complementa una atención integral.
La diabetes es en gran medida prevenible, y los hábitos de vida desempeñan un papel clave. Una dieta equilibrada, la reducción del consumo de alimentos azucarados y procesados, la actividad física regular y el mantenimiento de un peso saludable son fundamentales para reducir el riesgo de desarrollar diabetes, ya que la obesidad incrementa notablemente el riesgo de padecerla.
La diabetes es una enfermedad crónica que se produce cuando el páncreas no produce suficiente insulina o cuando el cuerpo no puede utilizar de forma eficaz la insulina que produce. La insulina es una hormona que regula el azúcar en la sangre. La hiperglucemia, o el aumento del nivel de azúcar en sangre, es una consecuencia común de la diabetes no controlada y, con el tiempo, provoca daños graves en muchos sistemas del cuerpo, especialmente en los nervios y vasos sanguíneos.
Las personas adultas con diabetes tienen entre dos y tres veces más probabilidades de sufrir ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. Junto con un flujo sanguíneo reducido, la neuropatía o daño a los nervios en los pies aumenta la posibilidad de úlceras, infecciones y, en última instancia, la necesidad de amputaciones.
La falta de control de la diabetes también incrementa el riesgo de desarrollar tuberculosis, lo que aumenta la probabilidad de mortalidad durante el tratamiento y el riesgo de recaída al finalizarlo. Ante estos riesgos, se subraya la importancia de realizar pruebas de detección temprana en los establecimientos de salud de primer nivel, donde se brinda atención prioritaria centrada en la prevención y control de esta enfermedad.