La Paz – Jueves 10 de Noviembre de 2016 | Unidad de Comunicación
En el marco del Plan Nacional para la Reducción Acelerada de la Morbilidad Obstétrica Grave y Mortalidad Materna y Neonatal 2016-2020, el Ministerio de Salud implementó la intervención del “Código Rojo” para prevenir y tratar la hemorragia obstétrica en hospitales de segundo y tercer nivel de atención.
El “Código Rojo” consiste en crear un esquema de trabajo organizado, de tal manera que cuando se presente una hemorragia obstétrica le permita al equipo asistencial seguir los pasos indicados sin desviarse del objetivo y trabajar de manera ordenada y coordinada para que pueda ser replicado en cada situación específica, logrando así disminuir la morbimortalidad materna generada por ésta.
Entre las causas de hemorragia obstétrica están: la atonía uterina (pérdida del tono de la musculatura del útero que conlleva a la ausencia de contracción del mismo y un consecuente retraso en su involución tras el parto) y la retención placentaria. Los partos traumáticos (laceraciones vaginales o cervicales), la rotura uterina, los restos ovulares postparto y los trastornos de coagulación también pueden provocar esta hemorragia.
La hemorragia obstétrica y en especial la que ocurre luego del parto es la principal causa de mortalidad materna en el mundo y se constituye en un factor significativo que contribuye a la morbilidad materna grave y a la discapacidad a largo plazo, así como a una serie de otras enfermedades maternas graves generalmente asociadas con la pérdida aguda y considerable de sangre.
Si bien la mayoría de las mujeres que tienen complicaciones hemorrágicas no tienen factores de riesgo clínicos ni antecedentes identificables, la sobredistensión uterina durante el embarazo (gran multiparidad, embarazo gemelar, etc.) está asociada con un mayor riesgo de hemorragia después del parto.
La prevención y el tratamiento de la hemorragia obstétrica son procesos importantes para mejorar la atención de la salud de las mujeres durante el embarazo, parto y postparto. Para esto, los proveedores/as de salud deben disponer de todos los insumos y medicamentos apropiados y desarrollar competencias en los procedimientos pertinentes para el tratamiento de la hemorragia.
En ese sentido, la Profesional de la Unidad de Redes de Servicios de Salud, Dra. Mariela Becerra, indicó que para la implementación del código rojo se actualizó las competencias del personal de los hospitales en el manejo de hemorragias post parto, dando inicio con el Hospital San Juan de Dios de la ciudad de Oruro. Asimismo, se realizó el seguimiento a la implementación.
Becerra, señaló que el módulo de capacitación sobre la hemorragia obstétrica pretende contribuir a reducir las complicaciones y muertes maternas asociadas a ésta complicación.
En Bolivia, la razón de mortalidad materna (RMM) es de 160 por 100.000 nacidos vivos. Según el Estudio de Mortalidad Materna para el año 2011, un tercio de defunciones maternas tuvo como causa básica la hemorragia (37%). “Los proveedores de salud de los diferentes niveles de atención, deben contar con las competencias necesarias y suficientes para responder efectiva y oportunamente ante una emergencia obstétrica, especialmente la hemorragia postparto. Por tal razón esta actualización fortalecerá la capacidad resolutiva de los profesionales médicos lo que permitirá el cumplimiento del Plan de Reducción Acelerada de la Mortalidad Materna”, finalizó la autoridad.
PD/UNICOM MINSALUD
EDICION: MC/UNCOM