La Paz, 3 de junio de 2024 (UC/MSyD).- La vacuna antiinfluenza protege a la población de los tipos de virus más peligrosos que circulan en el país y en el mundo, como la Influenza A (H1N1), Influenza A (H3N2), e Influenza B. Por ello, es necesario que los grupos de riesgo acudan prioritariamente a la vacunación, señaló el viceministro de Promoción, Vigilancia Epidemiológica y Medicina Tradicional, Max Enriquez.
“Recién vamos a empezar la temporada realmente de frío, y ustedes han debido escuchar que ya hay temperaturas por debajo de los 3 grados, 5 grados, 10 grados en el lado potosino, y eso va a implicar que las personas con enfermedades de base puedan contraer más fácilmente la influenza, sabiendo que ya está circulando A3N2, A1N1, influenza A e influenza B, por eso debemos de aplicar esta vacuna que los va a proteger por lo menos de estos tipos de virus”, sostuvo la autoridad.
La vacuna está compuesta por virus para la H3N2, H1N1, Influenza A e Influenza B y está fabricada tomando en cuenta la circulación de estas variantes de la influenza, por ello es la adecuada para proteger a la población.
El Ministerio de Salud y Deportes, mediante el Programa Ampliado de Inmunización (PAI), entregó a los nueve Servicios Departamentales de Salud (SEDES) 1,8 millones de dosis para su distribución en todos los centros de salud y posterior aplicación de las mismas, en el marco del Plan Nacional de Vacunación Contra la Influenza Estacional del 2 de mayo al 31 de julio, con el objetivo de proteger a la población de riesgo en primera instancia.
La dosis de la vacuna se aplica mediante un inyectable intramuscular. Cada año, dentro del esquema regular de vacunación, los bebés de seis a 11 meses de edad deben recibir dos dosis, y de 12 a 23 meses de edad, una dosis; los adultos, una dosis única.
Está vacuna debe aplicarse sistemáticamente año tras año, principalmente en los grupos vulnerables determinados por el Ministerio de Salud y Deportes, como los mayores de 60 años, las personas con enfermedades de base, las mujeres embarazadas, el personal de salud que entra en contacto directo con los pacientes, y los menores de 12 años.
En esa línea, el viceministro Enriquez explicó que la vacuna comienza a surtir efecto entre los 10 y 14 días luego de su aplicación, y confiere inmunidad de un año. Su composición se revisa y actualiza cada año, ya que el virus de la influenza muta constantemente.
“Es una medida de prevención previa a la época de invierno”, añadió y enfatizó que la vacuna contra la influenza puede aplicarse de manera simultánea con otras vacunas, de acuerdo con la edad y el esquema regular, como la antipolio (IPV), VPH o COVID-19. Este proceso no representa un riesgo para la persona que la recibe ni aumenta o hace más fuertes las molestias posteriores a la vacunación.
Asimismo, señaló que existen medidas complementarias para prevenir enfermedades respiratorias en esta época de invierno, como una buena hidratación, buena alimentación, y otras medidas de contención que son el uso del barbijo, uso de alcohol en gel, lavado constante de manos y el distanciamiento. Estas medidas son útiles y necesarias para reducir los contagios masivos.